⏳ El Barça pone fecha límite: 30 de junio
En las oficinas del Camp Nou hay una prioridad clara antes del cierre del ejercicio económico: resolver el futuro de Frenkie de Jong. El club quiere cerrar su renovación antes del 30 de junio para reorganizar la masa salarial y facilitar las inscripciones de los nuevos fichajes del proyecto Flick.
La operación es estratégica en todos los sentidos: deportiva, institucional y económica. Y aunque no será sencilla, el escenario actual invita al optimismo moderado.
✅ De Jong quiere seguir: paso al frente del jugador
El giro clave ha llegado desde el propio futbolista. Frenkie de Jong ha dejado claro que su intención es seguir “sí o sí” muchos años más en el Barça. Esta voluntad personal ha reactivado las conversaciones, desatascando las dudas de meses anteriores, especialmente por parte de sus agentes.
Ahora es el jugador quien está liderando directamente las negociaciones con Deco, dejando en segundo plano a sus representantes. Un gesto que el club valora muchísimo.
💼 Un contrato complejo… pero posible
La clave está en reformular el contrato actual. Se están estudiando fórmulas para diferir cantidades y adaptar su salario a la realidad económica del club. El Barça no quiere prescindir de él, pero sí necesita ajustar su ficha actual para poder inscribir refuerzos y aliviar la masa salarial.
La renovación permitiría extender el vínculo más allá de 2026 y liberar carga a corto plazo. Aunque no será un recorte como tal, sí se busca un equilibrio que beneficie a ambas partes.
🔄 No renovar no implica venta
A diferencia de otros casos, como el de jugadores a punto de finalizar contrato, el Barça no contempla vender a Frenkie en caso de que no se cierre la renovación. Su continuidad está garantizada para la temporada 2025/26.
Hansi Flick lo considera clave en su esquema, y el propio entrenador fue quien solicitó mantenerlo el verano pasado. El rol creciente del neerlandés ha sido evidente en los últimos meses.
💬 Flick, pieza clave en el cambio de rumbo
Flick ha sido determinante para cambiar la percepción del jugador. Le prometió minutos, liderazgo en el centro del campo y protagonismo. Y ha cumplido. El final de temporada de Frenkie ha sido uno de los mejores desde su llegada al club.
Ahora ve que en Barcelona se está gestando un proyecto ganador y quiere ser parte activa de ese crecimiento. Ya no se siente desubicado, ni prescindible. Siente que encaja, y eso lo cambia todo.
⚖️ Un pacto necesario para todos
Más allá del compromiso deportivo, la operación también busca generar alivio financiero. Ajustar su contrato permitirá al club ganar margen de maniobra en la planificación del próximo curso, sin renunciar a uno de sus pilares en el campo.
El Barça confía en cerrar el acuerdo a tiempo. No es fácil, pero hay buena voluntad. Y sobre todo, hay interés mutuo en seguir juntos.